“No
tengo idea de quién o qué es Dios.
Pero sí
creo en un poder espiritual mayor.
Lo siento en particular, cuando estoy en la
naturaleza.
Es algo
que es más grande y más fuerte que yo o cualquiera.
Lo siento. Eso es suficiente para mí.”
Realmente
conocí a Jane Goodall cuando vi un video por facebook, donde llevaba una chimpancé a su hábitat y se
despide con un abrazo de ella. Fue conmovedora la escena, la relación establecida con este primate, el
sentimiento demostrado por el animal fue enternecedor cuando el busca
despedirse de ella.
Busqué para saber quién era. Su filosofía de
vida a través de las entrevistas que leí, nos lleva a pensar que está más allá
del bien y el mal. Jane y muchos que trabajan para la vida, realizan por la
conservación, el reconocimiento del otro, sin importar que es, pues comprenden
desde siempre, todo lo que huela a naturaleza es parte de nosotros mismos.
Esto
se puede concluir cuando en sus disertaciones responde desde la espontaneidad,
llena de sabiduría obtenida en la experiencia en sus acciones llevándola a esa
ponderación de la vida y la naturaleza.
Goodall
es conocida por sus estudios sobre la vida social y familiar de los chimpancés.
Empezó a estudiar en la comunidad de chimpancés de Kasakela, en el Parque
nacional Gombe Stream, Tanzania, en 1960.
En
1977, Goodall estableció el Instituto Jane Goodall (IJG), el cual apoya a la
investigación de Gombe, y del cual ella es líder global, en un esfuerzo por
proteger a los chimpancés y a sus hábitats.
La
investigación de Goodall en Gombe Stream es reconocida en la comunidad
científica por contradecir dos creencias muy arraigadas en aquel entonces: que
solamente los humanos podían crear y utilizar herramientas, y que los
chimpancés eran vegetarianos. Observando a un chimpancé alimentarse de un
termitero, pudo apreciar que éste colocaba repetidamente tallos de pasto en los
hoyos del montículo y los removía cubiertos de termitas, «pescando» termitas
efectivamente. Los simios también tomaban ramitas de los árboles y les removían
las hojas, para hacerlas más efectivas, una manera de modificar objetos, lo que
es el inicio rudimentario de la construcción de herramientas. Los humanos se
habían distinguido a sí mismos del resto del reino animal como «Hombre, el
creador de herramientas» por mucho tiempo. En respuesta a los hallazgos
revolucionarios de Goodall, Louis Leakey escribió: "Ahora, debemos de
redefinir al hombre, redefinir a las herramientas o aceptar a los chimpancés
como humanos".
Hoy
en día, Goodall dedica virtualmente todo su tiempo a la defensa de los
chimpancés y el ambiente, viajando casi 300 días al año. Goodall también es un
miembro del consejo del santuario de chimpancés más grande fuera de África,
Save the Chimps (Salven a los Chimpancés) en Fort Pierce, Florida. Ella es una
conservacionista a tiempo completo.